31 de enero de 2010

Luis Landero: Retrato de un hombre inmaduro


Retrato de un hombre inmaduro, la sexta novela de Luis Landero. nos presenta a uno de sus habituales antihéroes. A lo largo de toda una noche de hospital, el anónimo protagonista resume su vida a una desconocida interlocutora. El protagonista, que paradójicamente afirma amar el silencio, habla y habla sin cesar de los nimios sucesos que ensamblan su existencia, "el cuento de los que nada tienen que contar."

La novela se puebla de dispersos recuerdos, de pequeñas anécdotas, de pintorescos personajes que de forma aislada producen cierta complacencia; pero que en su conjunto acaban aburriendo de la misma forma que cansa la implacable verborrea de ese desconocido compañero de vagón que todos hemos sufrido que aprovecha un largo trayecto en tren para compartir con los demás pasajeros sus más insignificantes rutinas.

Es cierto que Luis Landero demuestra maestría en la narración, que domina de forma ejemplar el difícil género del monólogo, digresiones, saltos temporales y anacolutos incluidos, pero el lector se pregunta una y otra vez por qué el autor derrocha su tiempo y su arte en cuestión tan intrascendente.

Luis Landero: Retrato de un hombre inmaduro, Tusquets Editores, 2009.

1 comentario:

José Núñez de Cela dijo...

muy buena prosa, pero inntrascen`dente, prácticamente de acuerdo.
Sigo a Landero desde su gran Juegos de la edad tardía, pero ya no lo reconozco, casi.

SALUDOS