23 de octubre de 2008

Henning Mankell: Zapatos italianos


Fredrik Welin, médico retirado, vive desde hace doce años en una lejana isla ahuyentando los fantasmas de su pasado. Comparte su soledad con un perro, un gato y un hormiguero que crece en su casa. La única relación social que mantiene consiste en alguna charla apresurada con el aprensivo cartero que de vez en cuando le lleva una carta.

Inesperadamente recibe la visita de Harriet, su antigua novia, a la que abandonó sin despedirse casi cuarenta años antes. Harriet, víctima de una enfermedad terminal, le pide que cumpla una vieja promesa. Este hecho provoca la aparición en su vida de otras mujeres. Por un lado, su hija Louise, cuya existencia Harriet le había ocultado. Por otro, Agnes, una antigua paciente a la que amputó un brazo por error, lo que le supuso abandonar su profesión. Por último, Sima, una joven refugiada iraní.

Estas mujeres hacen que Fredrik Welin afronte la realidad. Tras ello, nada volvería a ser como antes: “Durante doce años había negado la realidad de una existencia fuera de las playas y los acantilados que me rodeaban... Me había convertido en un eremita que no sabía lo que sucedía fuera de la cueva en que se escondía... Comprendí que no podía seguir viviendo esa vida.”

En la línea de Profundidades, Henning Mankell nos ofrece una melancólica reflexión sobre la soledad, el paso del tiempo, las relaciones humanas y el compromiso personal. Muy recomendable.
Henning Mankell: Zapatos italianos, Tusquets Editores, 2007

2 comentarios:

ariel-conlaluna dijo...

No conozco a este autor, pero los asuntos y las reflexiones relacionadas con la soledad me interesan, gracias por la sugerencia.

Anónimo dijo...

hace un par de días un amigo me recomendó el libro. hoy lo hace el dr. winter. lo leeré. saludos.
prado